Los cristales de cuarzo han sido empleados en distintos tiempos y en distintas culturas. Los chinos e hinduístas lo llaman “piedra viva” y llevan utilizandolo como transmisor de energías esde hace cientos de años. Según sus creencias el cuarzo permite el equilibrio y reenergización de los sistemas biológicos transformando y amplificando energía.
Los cristales de cuarzo son conversores y transformadores de energía. Pueden acumular la energía y liberarla en el momento necesario. Los cristales de cuarzo han absorbido durante milenios energía del mismo campo magnético de la Tierra, acumulan la energía del sol y recogen los residuos de energía cósmica de galaxias lejanas, por lo que poseen su propio campo de energía, focalizan, amplían y dirigen la energía a su entorno y a las personas equilibrando su campo magnético.
Sirven para curar, meditar, expandir la mente, inspirar claridad y confidencia, solicitar ayuda ante una situación específica, o simplemente como protección contra cualquier mala vibración. Ayudan a la concentración y visualización mental y potencian el uso de otros cristales.
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